domingo, 7 de abril de 2013

Abi, todo un ejemplo de superación.

Cuando en el minuto 22 de la segunda parte Piqué se dirigió a los banquillos para ser sustituido terminaba un año de operaciones y rehabilitación para su compañero Eric Abidal. El defensa del F.C. Barcelona disputó anoche sus primeros minutos después de que hace un año fuera sometido a un trasplante de hígado. El calvario del jugador se inicio en marzo de 2011. El club anunció que a Abidal se le había detectado un tumor en el hígado.
El 10 de abril del año pasado, a Abidal le fue trasplantado un trozo de hígado, donado por su primo Gerard. Tras la operación, los médicos anunciaron que tendría que medicarse de por vida y que sería complicado que volviera a jugar a nivel profesional.  Tras la operación, el lateral francés volvió a entrenar y demostrando unas enormes ganas de superación  consiguió recuperarse.
En diciembre de 2012 los médicos anunciaron que Abidal podría volver a jugar al fútbol y empezó a entrenarse con el resto del equipo. Este sábado ha vuelto a sentirse otra vez futbolista.
Abidal se ha convertido en todo un ejemplo de superación y fuerza para otros miles de  trasplantados en todo el mundo.

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